House sitting: cómo viajar cuidando casas y mascotas
Imagina poder viajar por el mundo alojando de manera gratuita. Si solo lo imaginas, es porque no conoces el house sitting. Esta nueva tendencia en el turismo colaborativo te propone viajar barato y conocer nuevas personas a lo largo del mundo, intercambiando tu tiempo por alojamiento. Ya sea cuidando una casa, haciéndote cargo del perro o regando las plantas, esta novedosa forma de viajar promete cambiar la perspectiva en que conoces tus destinos.
¿Qué es el house sitting?
Si traducimos su nombre, house sitting significa «cuidar casas». Esta es una modalidad de turismo colaborativo donde personas ofrecen su tiempo para cuidar hogares, mascotas y jardines de otras personas que se ausentarán de sus casas por un tiempo. ¡Lo mejor de esto es que es gratis!
Esta manera de viajar se basa en una comunidad que busca explorar el mundo a bajo costo, intercambiando sus servicios de cuidador por alojamiento. La parte entretenida del house sitting es que puedes alojar desde una noche hasta un año completo, con todas las comodidades que te puede entregar una casa. Además, entrega una perspectiva de viaje distinta, porque te permitirá tener contacto con los locales y conocer el destino de manera más pausada.
Si bien en Sudamérica no se ha masificado lo suficiente, si viajas a Europa o América del Norte el house sitting podría ayudarte a vivir unas vacaciones inolvidables. Esta idea es tan genial, que existe gente que vive haciendo esto.
¿Cómo funciona el house sitting?
El house sitting funciona de la siguiente manera. Una persona saldrá de vacaciones por una semana, pero no puede llevar a su mascota y no quiere pagarle a alguien por cuidar a su perro y su casa. Entonces, esta persona inscribe su casa en uno de los sitios buscando personas que puedan realizar el trabajo.
Mientras tanto, otra persona viaja con poco dinero o tiene ganas de ahorrar y necesita alojamiento. Al igual que con el couchsurfing, debes inscribirte en una de las páginas, crear un perfil y comenzar a buscar hogares que cuidar. Cada vez que te ocupes de una casa, el dueño te evaluará, incrementando las posibilidades de encontrar otros lugares que cuidar (si es que lo haces bien, por supuesto).
Dos de los sitios más importantes son Trustedhousesitters y Housecarers. Para poder inscribirte y crear un perfil deberás pagar alrededor de US $100 por año. Pero vamos, no es tanto en comparación a los beneficios que encontrarás.
¿Cuáles son los trabajos que debes hacer mientras cuidas una casa?
Generalmente los trabajos que debes hacer son simples, como cuidar y alimentar mascotas, mantener el aseo del lugar donde te quedas, recibir correo y cosas por el estilo. En definitiva, debes hacer las mismas cosas que haces en tu casa.
Aunque estas tareas pueden variar según las necesidades del dueño del inmueble. Hay casos donde los sitters han quedado al cuidado de granjas completas, haciéndose cargo de caballos y gallinas, entre otras especies. Así que, elige bien qué tipo de casa quieres cuidar.
¿Es seguro?
Un gran SI. Estas plataformas de turismo colaborativo funcionan bajo la premisa de la confianza y valoración de los usuarios. Es decir, son los mismos dueños quienes validan a los cuidadores.
Además, existen tres categorías de verificación dentro de los usuarios de estos sitios. Un primer nivel de verificación es la información básica, que consiste en la dirección de e-mail, el número de teléfono y recomendaciones. El siguiente nivel de seguridad es la verificación de identidad y de los documentos del sitter. Finalmente, hay una tercera categoría de verificación, que incluye una revisión de los antecedentes criminales de los cuidadores.
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