1. Valle de la Luna
En plena Cordillera de la Sal, donde los Andes y el Desierto de Atacama se dan la mano, surge este maravilloso paisaje que recuerda la superficie lunar. Rocas de caprichosas formas y dunas de arena se entremezclan con vastas capas de sal. De día es majestuoso, durante el atardecer y amanecer te cortará la respiración. Más información aquí.
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2. Laguna Roja
Esta extraña joya aún permanece a la sombra de los principales itinerarios turísticos. A 200 kilómetros al norte de Iquique (Región de Arica y Parinacota), las normas más elementales del orden natural se invierten para que el agua tenga un color rojo intenso. Muchas leyendas intentan dar una explicación a este extraño fenómeno, aunque las algas y sedimentos en suspensión parecen el motivo más plausible. Tour Laguna Roja y precios aquí.
3. Ascensor del Cerro Polanco
El ascensor más singular de Valparaíso es sin duda el del Cerro Polanco. A diferencia del resto, es el único que asciende y desciende de forma vertical. Finalizado en 1915, se diseñó el acceso a través de un profundo túnel que conecta con el ascensor. De allá, la elevación es hasta lo alto de una torre con vistas a toda la bahía del puerto de Valparaíso.
4. Playa Anakena
Los que piensen que en Rapa Nui (Isla de Pascua) abundan las playas, van muy equivocados. La isla es de origen volcánico y bien agreste, repleta de acantilados… a excepción de Anakena. Un remanso de arena fina, palmeras y aguas cristalinas y tibias. Pero no sería del todo especial si no fuera por su cercano «ahu», plataforma ceremonial con siete moáis, cuatro de ellas con «pukao», el tradicional sombrero de piedra de las figuras.
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5. Muelle de las Almas
En la isla de Chiloé, llena de mitología, encuentras este lugar misterioso y con un atractivo difícil de describir. La leyenda cuenta que los acantilados de Cucao están repletos de ánimas: almas en pena que producen llantos, gritos y lamentos. Llaman al balsero que debería llevarlas al lugar de descanso eterno. Independiente de las inquietantes historias, el «muelle a ningún sitio» ofrece unas vistas que superan cualquier adjetivo.
6. Parque Nacional Conguillío
Puro contraste entre lava solidificada y bosque nativo de araucarias, coihues y ñirres. Este paraje de la Región de la Araucanía ofrece un entorno repleto de lagos y lagunas, con el majestuoso volcán Llaima, uno de los más activos de toda Sudamérica, dominando el panorama. Además de su rica fauna, su vegetación es uno de los últimos testimonios de la flora del cretácico superior.
7. Los fuertes de Valdivia
En su afán para proteger la estratégica ciudad de Valdivia, los españoles construyeron un sistema de fortificaciones que acabó convirtiéndose en un uno de los más importantes de toda América. Diez construcciones entre fuertes, baterías y castillos actuaban como disuasorio para piratas y potencias enemigas. Por este motivo recibieron el nombre de Llave del Mar del Sur, y garantizaba la seguridad de un puerto fortificado a las embarcaciones que debían atravesar el cabo de Hornos, el paso que conectaba el Océano Atlántico y el Pacífico.
8. Glaciar Exploradores
Este coloso de hielo de 23 kilómetros de longitud y 3 de ancho, es uno de los más accesibles de la Región de Aysén. Desde el punto de acceso, a dos horas de Puerto Tranquilo, basta caminar 20 minutos para llegar a un magnífico mirador que permite admirar la fuerza imparable de la naturaleza. Además, puedes vivir la aventura de hacer un trekking por su superficie (¡obviamente con crampones!).
9. Caleta Tortel
Esta idílica localidad de la desembocadura del río Baker, al sur de Coyhaique, está construida sobre una gran red de pasarelas de madera de ciprés. Aquí no hay ni rastro de cemento o asfalto. Todo son casitas y embarcaderos, en un entorno de enormes montañas y exuberante vegetación. Soñarás con quedarte a vivir allá, no encontrarás un lugar más apacible.
10. Mirador las Torres
Qué decir del Parque Nacional Torres del Paine, una de las mecas mundiales de los amantes del trekking y la naturaleza. Hemos elegido este lugar en concreto por ser el mejor lugar donde admirar la estampa más representativa de este fenomenal espacio natural. Sus tres colosales paredes de granito, la más alta de más de 3.000 metros, son una imagen que quedará grabada a fuego en tu memoria. Encuentra más info de tours y excursiones en Torres del Paine aquí.
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